Como cada año ha llegado el momento
de elegir y que ustedes conozcan cuales son las mejores y más sobresalientes
películas. Esta vez, la dificultad no se hizo esperar y claro, habrá muchas que
se quedarán fuera de la lista, habrá otras que generarán sorpresa, misterio o
vituperios por aparecer en el listado, pero es algo que siempre conlleva el
elegir a las 10 mejores películas del año.
2018 fue, desde mi punto de vista, un año cinematográfico con muchos altibajos, nunca al nivel de aquel apoteósico 1999, pero la oferta fílmica estuvo plagada de calidad, tanto comercial y autoralmente. Y como ya es costumbre, esperar la época del año en la que las cartas fuertes para los premios hacen acto de presencia, y que por ende, los cinéfilos estamos más que satisfechos por los distintos trabajos fílmicos que se nos ofrecen para degustar en la sala de cine o en sus respectivos Screeners.
Y una vez terminada la lista, lanzo
las siguientes preguntas:
¿Cuáles de las siguientes elegidas
terminarán nominadas al Oscar de Mejor Película? Y de esas, ¿Cuál será la gran
ganadora de la noche? ¡El Año pasado ese honor recayó en el lugar Número 9 (“The
Shape of Water”)!
Disfruten la lista:
10.-
“Spider-Man Into The Spider Verse” (Columbia Pictures)
Hace Catorce años, precisamente el
superhéroe arácnido hizo su aparición en mi lista con esa obra Maestra que Sam
Raimi dirigió, ahora regresa pero en su versión animada, pero no cualquiera.
lo que da un toque distintivo del
resto de películas que hemos visto es la manera en la que juega con su propio
universo, aprovecha lo mejor de la historia que da pie al origen del personaje
y la reescribe, esto para el fan más
exquisito de los cómics podría resultar en una aberración: ¿Dónde está el Tío
Ben? ¿Por qué Miles Morales (que apareció en los cómics en el 2011) y no Peter
Parker como lo dicta el canon?
El subgénero de los Superhéroes, por
increíble que parezca aún puede darnos un puñado de sorpresas, con la gente
adecuada en el proyecto Hollywood seguirá sacando provecho de ello. Hemos
tenido aciertos en las producciones de Marvel y Disney, Pixar ha hecho también
algo perfecto con “The Incredibles 1 y 2”, DC y Warner sigue luchando en ello (“Wonder Woman” 2017 es el indicio de
mejoría) pero para quien esto escribe, “Spider-Man
Into the Spider-Verse” (2018) es uno de los mejores homenajes que el
personaje ha recibido en el cine.
9.- “ROMA”
(Esperanto Films)
Por estas fechas, ya es prácticamente
repetitivo todo lo que se pueda escribir al respecto de la película de Alfonso
Cuarón: ‘oda al recuerdo, a la memoria, al pasado, a la vida, al amor; como si
se tratase de recorrer los espacios de nuestra mente, nuestro propio museo
interno con la finalidad de recordarnos la importancia de vivir’, etc.
Y lo es, conocido por su nivel de
perfeccionista en el set (cuál director que sabe hacer bien su trabajo), Cuarón
regresa a México para hacer la película más importante a nivel personal y
profesional, también para inyectarle vitalidad a una industria con miles de
problemas y apuestas fílmicas tan comerciales como desechables. La prueba de
que la experiencia adquirida en el extranjero (dada la profesión) bien aplicada en tu lugar de origen da como
resultado un producto de calidad. Sigo pensando que, hasta el momento “Children Of Men” (2006) es la Obra
Maestra del director mexicano.
8.- “Leave
No Trace” (Bron Studios)
¡Bienvenida de vuelta Debra
Granik!
La directora estuvo en la lista del
2010 con su genial “Winter’s Bone” y
su historia dentro de una pequeña comunidad rural norteamericana y que nos
dejaría un verdadero tesoro: Jennifer Lawrence.
Pero fanatismos aparte, la directora
indie hace su regreso con otra historia intimista, centrada en la relación
familiar, un padre y su hija, el sentido de la pertenencia y de la
sobreprotección, una historia con personajes y sobre sus personajes tan humanos
que atrapa y te deja desolado.
Más películas cómo está y con un gran
actor como Ben Foster, ¡Por Favor!
7.-
“Eighth Grade” (a24)
La película es una visión honesta,
realista y demasiado humana, despojada de cualquier
sentimentalismo/maniqueísmo; control total de su autor para mostrar sin tapujos
los miedos, inseguridades típicos de la adolescencia, la búsqueda de la
aceptación de los demás y la idolatría a otras figuras a través de Redes
Sociales, vamos pues Bo Burnham habla y transmite el lenguaje adolescente cual
Millenial que es.
Elsie Fisher da una actuación con
calibre de Premios, merecería la Nominación al Oscar con su retrato de la
taciturna Kayla y su Novel director al cual hay que seguirle en su camino tras
este sólido debut.
6.- “First
Reformed” (Fibonacci Films)
Si Cuarón con su “ROMA” es un tratado
sobre la memoria, los recuerdos; Paul Schrader configura otro, centrado en el
luto, el dolor, la religión y hasta el terrorismo (por increíble que parezca).
El director plantea muchas cuestiones
que retan a su espectador, no basta con un visionado ya que su argumento abre
la puerta al análisis y/o conversación por las acciones de su personaje
principal y su dilema moral. Ethan Hawke en estado de gracia con un personaje
atormentado, complejo, lleno de suficientes matices dramáticas que le han
valido hasta el momento ser alabado en los circuitos de la Crítica. Schrader
nos regala en el personaje de Hawke otra figura a inscribirse en el canon
cinematográfico como lo hiciera con Travis Bickle. Obra Maestra fuera de tiempo
pero muy necesaria.
5.- “Can
You Ever Forgive Me?” (Fox Searchlight)
Tras memorables trabajos como el de
Debra Granik (que ocupa un lugar en la lista de este año) y el estreno tardío
de la excelente “The Rider” (2017)
de Chloé Zhao, Marielle Heller me cautivó con su semi biopic tragicómica de Lee
Israel y sus métodos cuestionables para encontrar la manera de subsistir en el
demandante mundo (en el contexto de la película) literario vía un estudio de
personaje.
Y no solo eso, hacer que una actriz
como Melissa McCarthy, enfrascada en la comedia (muy malas por cierto – aunque
admito que “The Boss” 2016 tiene un
par de puntadas simpáticas -) se aleje (parcialmente) del género y de una
actuación que le exija una faceta muy poco explorada en ella. Nunca su talento
se había aprovechado tan bien y que evita caer en cualquier tipo de artimaña
sentimentalista para congraciarnos con las acciones de su personaje. La
relación en pantalla con Richard E. Grant es innegablemente prodigiosa que les
ha otorgado múltiples nominaciones y se espera así sea para el Oscar.
4.-
“Manbiki kazoku” (Gaga Communications Inc)
Si Cuarón con su “ROMA” añora el
recuerdo de una familia y su unión, Hirokazu Kore-eda se planta ante él y le da
una lección de cómo mostrar verdaderamente esos lazos afectivos en pantalla,
faltaba más.
Un tema convertido en obsesión para
el director japonés en su filmografía, un narrador que a través de su cámara
convierte al espectador en un integrante más de ese círculo social al que
disecciona.
Una familia con sus altibajos, días
buenos y malos, felices e infelices, pero que no les importa mientras sigan
juntos. No hay moralidad, el director construye su narrativa a través de
sutilezas, mucha compasión por sus personajes más no los convierte en mártires.
Da golpes en seco y aun así sigue siendo conmovedor como te puede envolver
dentro de su argumento.
Para Kore-eda con este magnánimo
filme todo se resume en: F A M I L I A = U N I O N.
Aplausos para Sakura Ando, brillante
actriz.
3.- “The
Favourite” (Fox Searchlight)
Heredera de “All About Eve” (1950) sin proponérselo del todo, la película
muestra la tríada perfecta de actuaciones femeninas del año.
Yorgos Lanthimos crea una sátira, una
historia perversa, ambiciosa y detallista oscilando entre el drama y la
comedia. Un monstruo que consume a sus protagonistas y al espectador por igual.
No es una simple tragicomedia de época, reúne muchas
características de este pero también se permite jugar consigo misma y ser
moderna, Lanthimos lo dice: siempre debe haber luz y oscuridad en mis filmes;
drama y comedia encuentran obscenamente en equilibrio.
2.- “Zimna
Wojna” (Protagonist Pictures / Apocalypso Pictures)
El Mejor Trabajo cinematográfico en
blanco y negro del año. Pawel Pawlikowski en hora y media narra una historia de
amor que si bien no es nada que no hayamos visto antes, pero sus imágenes se
encargan de hacernos creer y caer en el poder del romance, altas y bajas de
cualquier relación, días de felicidad y tormento… gracias al magnetismo de la
pareja en pantalla.
Es sofisticada y sin grandes
aspavientos, ni parlamentos rebuscados. La música también juega un papel
preponderante aquí, todo en atmósfera intimista, clásica y política.
Joanna Kulig protagonista de Oro.
1.- “If
Beale Street Could Talk” (Annapurna Pictures)
Nos encontramos nuevamente Sr.
Jenkins, me da un gusto enorme que así sea y precisamente en el mismo puesto
que hace dos años.
Adaptando la novela escrita por James
Baldwin y publicada en 1974, nos habla de una gran relación amorosa
enfrentándose a la injusticia, al prejuicio, la condición humana que no conoce
raza ni estrato social, época o momento cultural, a través de los hermosos
primeros planos de Jenkins, ahonda en la psicología de cada uno de su
personajes y nos regala las imágenes más poéticas del año.
Revelaciones actorales de Stephen
James y de Kiki Layne, pero les digo algo… Regina King es la dueña absoluta de
la función no solamente de sus escenas. Su personaje es la antítesis de
Mo’nique en “Precious Based on The Novel
‘Push’ By Sapphire” (2009) y lo que va a hacer en Puerto Rico bien le ha
valido recibir los premios del circuito de la Crítica al igual que en la
reunión de ambas familias para dar a conocer una noticia importante.
Jenkins transmite las emociones de
los personajes en sus ya característicos primeros planos, su cámara abraza a
los personajes, es imposible no sentir el dolor de Fonny o la angustia de Tish
ante el futuro como madre soltera. Todo narrado y expuesto cual poema que
sentirse abrumado ante la película y su drama genuino, clásico pero con temas
actuales resulta imposible de resistir.
“Moonlight” (2016) no fue un golpe de suerte, sino el detonante para cimentar el camino de
un autor. Sr. Jenkins, he vuelto a caer en sus imágenes en movimiento llenas de
sutileza como de emociones.
Jenkins, Granik, Schrader,
Pawlikowski, Heller, Burnham, Lanthimos y Cuarón con sus filmes estrenados en
este año recurrieron a la evocación del cine austero, contemplativo, falto de
cualquier artilugio de la maquinaria de Hollywood, aquel que centra su atención
en los personajes y su entorno social a través de imágenes cautivadoras que
ponen en el panorama del espectador actual la visión de autores profundos
alejados de las fórmulas probadas. El Cine necesita una nueva reputación, si es
a través de estos autores pues que mejor.
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