A Lilies Films production Actores: Noemi Merlant, Adele Haenel, Luana Bajrami, Valeria Golino
Musicalización: Jean-Baptiste de
Laubier, Arthur Simonini Fotografía:
Claire Mathon Productor: Benedicte Couvreur
Duración: 121 Minutos Guion: Céline Sciamma Dirección: Céline Sciamma
Incontestable premio al guion
obtenido en Cannes, “Portrait de la
jeune fille en feu” (2019) contienen las más bellas (hasta el momento)
imágenes en movimiento en lo que va del año. Céline Sciamma no solo se enfoca
en mostrar la turbulenta pero romántica relación de ambas protagonistas sino de
también crear verdaderos cuadros de arte teniendo como lienzo perfecto la
pantalla grande.
La pintora de este cuento es
Marianne (Noèmie Merlant), ha recibido el encargo de realizar el retrato de
bodas de Héloïse (Adèle Haenel), una joven que acaba de dejar el convento y que
se enfrenta a un inminente Matrimonio. Marianne ha de trazar el cuadro sin que
su modelo lo sepa, ya que esta odia la idea de ser retratada solo para
contentar a su futuro esposo. Ambas mujeres conviven y en medio de la
realización del retrato en cuestión se inicia un flirteo interesante de
miradas, acercamientos, también de miedo y rechazo inicial hasta culminar en
una relación.
La directora deja muy en claro el
tono y/o atmósfera que impregnara el metraje, un juego sutil de miradas y
emociones plasmadas en cada encuadre y cada plano contraplano que transmite el
anhelo y deseo de ambas mujeres. Un hábil equilibrio de romance y drama
plasmado con la mayor sencillez y sensibilidad.
Adèle Haenel y Noémie Merlant,
las estrellas de la función a través de esos primeros planos consiguen
transmitir la pasión de sus personajes, sus actuaciones por demás contenidas
encierran el misterio, deseo y amor que va creciendo constantemente, el
verdadero descubrimiento de lo que implica ese cariño y sus contratiempos
sociales y culturales. Marianne y Héloïse no se alejan de la misma complejidad
que, verbigracia para Ennis del Mar representó el abrirse ante Jack Twist, la
entrega absoluta de Therese Belivet hacia Carol, el seductivo y sensual tinte
azul que cautivó a Adèle o la tensión sexual entre Oliver y Elio. Las actrices
encienden un volcán (figurativo) que una vez llegado el final (que pondrá a
prueba hasta el corazón más duro) hace erupción. Es el retrato de ambas que
necesitaban del candoroso fuego para despertar.
Pero hay algo más en “Portrait de la jeune fille en feu” (2019)
que solo el romance, también un discurso sobre la oportunidad artística, el
breve momento en el que la mujer puede igualar en talento y en la misma técnica
al hombre, el capricho profesional de marcar estilo y prestigio. Sciamma plasma
las emociones en cada fotógrama, es imposible no sentir compasión y empatía por
sus estelares, enciende la llama y aviva el fuego, fuego que está lleno de
miradas y silencios.
CALIFICACIÓN PARA “PORTRAIT DE LA JEUNE FILLE EN FEU” (2019): EXCELENTE
Y MEDIA
Nominaciones para la Estatuilla
Dorada: fotografía, vestuario, guion original.
Twitter: @neonrated
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