Metro-Goldwyn-Mayer
Actores: Joaquim de Almeida, Daniela Melchior, Billy Magnussen, Jessica
Williams, Conor McGregor, Lukas Gage, Arturo Castro, B.K. Cannon, Beau Knapp,
Darren Barnet, Jake Gyllenhaal Musicalización: Christophe Beck Fotografía: Henry Braham Productor: Joel Silver Duración: 114 Minutos Guion: Anthony Bagarozzi, Charles
Mondry Dirección: Doug Liman
Elwood Dalton (El Nominado al
Oscar Jake Gyllenhaal) se presenta entrando en el ring de gladiadores de una
sórdida competencia de lucha en un circuito subterráneo, donde todo lo que
tiene que hacer es quitarse la sudadera con capucha, la camisa y revelar quién
es; eso es suficiente para que su oponente ceda. Cuando se enfrenta por primera
vez a los matones que han aparecido para causar problemas, les pregunta si hay
un hospital cerca porque después el mismo se encargará de llevarlos ahí. Desesperado
por dinero en efectivo después de dañar gravemente su automóvil, acepta un
trabajo que no le interesaba Bouncer en una casa de carretera en los Cayos de
Florida. La dueña del bar, Frankie (Jessica Williams), heredó el bar de su
padre y quiere estar a la altura de su estándar, pero los matones locales que
trabajan para el acaudalado Ben Brandt (Billy Magnussen) han estado causando un
alboroto nocturno a propósito con la esperanza de cerrar el lugar para siempre
y abrir un resort de lujo. Al principio, Dalton maneja bien las cosas e incluso
entrena a un par de los hombres que trabajan en la Road House para manejar
situaciones difíciles. Pero cuando el impredecible y psicótico Knox (Conor McGregor)
aparece, Dalton se da cuenta de que se ha metido mucho más de lo que esperaba.
El Show de Gyllenhaal, Doug Liman
se vale de múltiples planos para hacer lucir el musculoso cuerpo del actor
quien a diferencia del Dalton interpretado en la Original por Patrick Swayze,
este se vende más corpulento, sarcástico y con mucho humor involuntario. Más
guerrero que alguien centrado.
El resto del elenco cumple su misión
a sabiendas de que el material solo busca el entretenimiento más pueril y burdo
posible. Aquí no es “Tár” (2022), “Oppenheimer”
(2023) ni mucho menos “Anatomy of a
Fall” (2023) que juegan en otra línea, no; aquí el director extiende su conocimiento
de cine comercial y es lo que precisamente vende. ¿Su más grande logro? La escenificación
de sus combates. Y es todo. Cine de Sodas y Pop Corn para comer hasta
el punto de explotar.
El legado de Swayze sigue intacto
y no porque la original sea una Obra Maestra, sino porque funcionaba bien para
el contexto de su época y porque ofreció una fantasía al espectador con una
nueva figura heroica.
CALIFICACIÓN PARA “ROADHOUSE” (2024): REGULAR
Nominaciones para la Estatuilla
Dorada: ----------------------------------------------------------------------------
X: @PrimeVideo
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