Director: James Wan (“Furious 7”)
Actores: Simon McBurney, Madison Wolfe, Maria Doyle Kennedy, Simon
Delaney, Frances O'Connor, Lauren Esposito, Benjamin Haigh, Patrick McAuley, Franka
Potente, Patrick Wilson, Vera Farmiga,
Guion: Chad Hayes, Carey W. Hayes, James Wan, David Leslie Johnson
Musicalización: Joseph Bishara
Fotografía: Don Burgess
Productores: Peter Safran, Rob Cowan, James Wan
Duración: 134 Minutos
Warner Bros. Pictures / New Line Cinema
Lorraine y Ed Warren,
interpretados con eficacia por la Nominada al Oscar Vera Farmiga y Patrick
Wilson, regresan al cine con una nueva historia, documentada en los años 70´s y
ubicada en Inglaterra. James Wan regresa también a la silla de director del
proyecto al que diera vida hace tres años y que resulto en una bocanada de aire
fresco dentro del ya sofocado género del terror y/o suspenso (a pesar de estar
bajo el mandato de los grandes estudios cinematográficos de Hollywood).
Sin aspavientos acerca de la
trama: Peggy Hodgson (Frances O´Connor) es una madre soltera que vive con sus 4
hijos, pero uno de ellos, la joven Janet (Madison Wolfe) es quien empieza a
tener cierta ´conexión´ con un ente del más allá – se presume que es algo mucho
peor que eso – que reclama su posesión. Los Investigadores Warren, quienes
acaban de cerrar el expediente Warren Amityville, cansados ya de tantas
entrevistas y comentarios al respecto, planeaban tomar un descanso y disfrutar
de grandes momentos en familia, pero pronto son localizados por miembros de la
Iglesia Católica Apostólica y Romana para atender la vicisitud de esta mujer y
sus hijos. Los Warren se ven, a pesar del tiempo transcurrido entre ambos
filmes, mucho más conservadores; dan una imagen de serenidad y de que a su vez llevan
un mensaje alentador. La Casa que habita Peggy y su familia se convierte en un
personaje más, pasillos sombríos, paredes maltratadas por los años, la economía
de Peggy no alcanza para hacer composturas… pronto, tanto para ella, sus hijos
y los Warren el lugar se convertirá en su peor pesadilla.
Ahora bien, ¿Qué podemos esperar
de “The Conjuring 2” (2016)?
Wan y sus guionistas hacen
evolucionar de manera correcta y adecuada a sus personajes, no por nada
Lorraine se encargó en el film anterior y en este también de figurar como
consultora para dotar de más credibilidad los casos expuestos. El cambio de
lugar, así como algunos de los actores recién llegados a la trama aportan, si
se permite la expresión, frescura a esta secuela.
Las actuaciones también siguen
muy bien cuidadas aquí, sobresaliendo la novata Madison Wolfe quien tiene
momentos muy escabrosos y recuerda en parte – guardando las distancias – el
gran trabajo de la nominada al Oscar Linda Blair. Y como siempre, la deliciosa
Vera Farmiga robándose cada escena en la que aparece con su sola presencia y
quien al parecer le ha sentado muy bien trabajar en el género del suspenso;
tanto en el film anterior como en su serie de T. V. Bates Motel.
Wan conoce y sabe lo que la
audiencia y los ejecutivos del estudio buscan en este tipo de filmes. Pero no
traiciona, a pesar de poder estar o no presionado para entregarnos un producto
que sea acorde a las exigencias comerciales del verano (entretenimiento y
diversión pueriles); su respeto al género que desde “Insidious” (2010) ha trabajado y a su vez con inteligencia. La Cámara
desplazándose entre los pasillos o colocándose a espaldas de los personajes, un
trabajo de edición que alarga varias secuencias importantes e impactantes, la
tonalidad de la imagen desde claroscuros que acentúan la tortura a la que Janet
es sometida y poca iluminación cuando todo transcurre con calma.
El Problema aquí, es que el
resultado se siente como una secuela digna y al nivel de su antecesora; pero no
más. Wan abusa de los encuentros entre Janet y el ente malvado y de cómo es
atemorizada. Otros personajes, como el de Franka Potente y la visión del mismo
ante los hechos no son explorados lo suficiente y el manto de fe y esperanza en
el que el Matrimonio Warren son mostrados le resta impacto y presencia hasta de
atrevimiento como la vez anterior.
“The Conjuring 2” (2016) sortea la suerte de salir bien librada y
mantener la calidad de su antecesora. Es cine comercial y James Wan muestra su
dominio para atrapar a la audiencia y darle lo que necesita.
¿Hay Sustos? Si
¿Hay Emoción y Diversión que
justifique el boleto para ir al cine? Si
¿El Público se estremecerá en sus
asientos? Si
¿Habrá mucho Pop Corn tirado en
el suelo por cada susto? Si
Pero algo es evidente, esta
secuela, ante la efectividad y sencillez de la brutal “The Witch” (2016) palidece. Estoy seguro que Wan hubiera preferido
hacer aquel film (si hubiese existido la ocasión, claro).
CALIFICACION PARA “THE CONJURING 2” (2016): BUENA
Nominaciones para la Estatuilla
Dorada: ----------------------------------------------------------------------------
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